El Marketing Online ofrece diferentes modelos de anuncios y distintas fórmulas para calcular la rentabilidad de una campaña orientada a la obtención de ciertos objetivos.
Según el objetivo que queramos lograr a través de la campaña de Google Adwords, para las empresas y Pymes, o de Google Grants, para las ONG’s o Fundaciones, llevaremos a cabo un modelo de anuncios u otro. También tendremos en cuenta a la hora de decantarnos por un modelo de anuncios en Internet el presupuesto y el tiempo que tengamos para invertir en la campaña de marketing online.
Los principales modelos de costes en una campaña de marketing online son: coste por impresión, coste por clic o visita, coste por lead, coste por adquisición, coste por visionado y coste por engagement.
Coste por impresión – Coste por 1000 impresiones (CPM)
Es el coste de una campaña publicitaria en la web relacionada directamente con el número de veces que se muestra un anuncio (impresiones).
Este es el modelo de coste más utilizado en las campañas de aumento del branding, es decir cuando las marcas o las ONG’s y Fundaciones quieren darse a conocer, hacer popular uno de sus productos o una iniciativa solidaria, por ejemplo.
Si buscamos un símil con el marketing tradicional, el Coste por impresión sería el número de veces que los peatones visualizan una valla publicitaria, por ejemplo.
El formato más popular en los banners es el coste por 1000 impresiones. Por ejemplo, si el coste por mil de un portal web es de 30 euros y al final del mes nuestro anuncio se ha mostrado 50.000 veces, el importe a pagar será de 30 euros x 50.000 veces / 1000 = 1500 euros.
Coste por clic o visita (CPC)
En este modelo el anunciante sólo paga por el número de clics que se hacen en su anuncio.
Este número de clics normalmente equivalen al número de visitas que recibe un sitio web, es decir que se paga por cada visitante que llega a nuestra web.
Quien ha pinchado en un anuncio de una marca normalmente muestra un interés en ésta, por lo que el porcentaje de conversión “visita-compra” suele ser mayor comparado con el modelo de coste por impresión.
Para que este modelo sea rentable es importante identificar qué porcentaje de las visitas se convierte finalmente en compra, en el caso de las marcas, y que porcentaje de visitas se convierte, por ejemplo, en donaciones, en el casa de las ONG’s.
Coste por lead (CPL)
Las formas más usuales de lead suelen ser un formulario enviado, la suscripción o registro a la web, etc. Por ejemplo, si una ONG está haciendo una campaña de donaciones debe valorar cuánto estaría dispuesta a pagar por datos de contacto (e-mail) de las personas más afines a su causa.
El anunciante debe tener claro qué porcentaje de leads se convierten finalmente en clientes. Con ese dato podrá evaluar con certeza si el coste por lead que le ofrece su proveedor es atractivo o no.
Coste por adquisición (CPA)
El anuncio sólo se paga cuando se vende el producto o se realiza la conversión, por ejemplo una donación.
El coste por adquisición o venta se utiliza en la mayoría de las tiendas online, ya que se puede medir fácilmente la transacción comercial.
El anunciante tiene que tener muy precisado el beneficio promedio que obtiene por cada producto vendido, ya que el coste por adquisición mermará el margen de beneficio.
Coste por Engagement (CPE)
Este modelo de coste publicitario se aplica especialmente para los anuncios que se hacen a través de las Redes Sociales.
El engagement es la participación que conseguimos con las publicaciones, concursos y otras acciones que hacemos en Social Media.
Por este motivo mediremos el resultado de nuestros anuncios si conseguimos lograr esa participación, nuevos seguidores o leads que nos vengan a través de estas acciones.
Ahora que ya tienes claros los modelos de anuncios en Internet y las distintas fórmulas para calcular la rentabilidad de una campaña publicitaria online, sólo queda que definas tus objetivos y te decantes por una de ellas.